Con algo de retraso (he de reconocer que la mudanza y adecentamiento de un piso exigen mucho tiempo) por fin me he puesto manos a la obra con un nuevo grupo de jugadores/alumnos para enseñarles algo de Historia y gestión del tiempo libre. Sin embargo, la aparición de un nuevo competidor (en realidad otra forma de ocio) ha estado entorpeciendo el que hubiese sido el desarrollo normal de las sesiones. Resulta que Magic The Gathering ha entrado con relativa fuerza en el nuevo grupo de jugadores, y parte de la culpa es mía, que me puse a enseñarles a jugar en la hora del patio.
En fin. Hace unas dos o tres semanas, mientras explicaba el Antiguo Régimen, un alumno de 4º de ESO vino con una triple necesidad de información: Primero, ¿Qué hizo Napoleón?; segundo, ¿Vas a volver a hacer eso de los juegos de rol?; y tercero, ¿Tú conoces Magic?
Así que, solícito, me propuse atender sus preguntas y, de este modo, me encontré de nuevo enseñando Historia y jugando a rol los lunes por la tarde y haciendo clases de Magic a la hora del patio.
Resultaba evidente que, por alguna razón, Napoleón había despertado el interés de alguno de mis alumnos, y no es para menos. Como personaje histórico sus campañas son grandes trasfondos para aventuras sin par y para grandes juegos de mesa. Muchos alumnos se sienten maravillados cuando ven cómo Napoleón lideró sus tropas desde Francia hasta Rusia. Otros exclaman ¡Qué jefe! cuando se les explica cómo se coronó a sí mismo emperador dejando al Papa con cara de ¡WTF! Ese bribón corso, que salva a Francia, domina Europa, es derrotado, enviado a la isla de Elba, se escapa, rehace su ejército, planta cara de nuevo a las monarquías europeas para ser derrotado y desterrado definitivamente a Santa Helena es todo un fenómeno. ¡Eso es una aventura!
En mi cabeza se formó una idea: Napoleón + juego de rol = 1808 o al menos fue lo primero que pensé. Sin embargo, es un juego que nunca he puesto en práctica y cuyo sistema no domino. Sabiendo que no iba a tener tiempo de preparar algo decente, decidí coger el Sistema Madre de Ludotecnia y hacer unas fichas para la ocasión.
Como escenario decidí hacer una fusión entre la aventura introductoria de 1808 y Un asunto de honor, del básico del Capitán Alatriste. El objetivo sería sencillo: rondar a una hermosa madrileña. Sin embargo, como suele pasar en cualquier aventura, nada es lo que parece y los personajes se ven involucrados en un sucio asunto de traición y espionaje. Por cierto, ¿Os había dicho que la visita a la casa de la muchacha acontece el 1 de mayo de 1808 y que al día siguiente se arma la de Dios?