Una parte fundamental del blog

NatxoIoana

El regalo de Ioanna

Hace un mes impartí una formación de 2 horas en Badalona invitado por el CRP de la localidad. Tocaba hablar, como no podía ser de otro modo, de gamificación y juegos. Esta formación no habría diferido en gran cosa de las restantes si no hubiese sido por un gran detalle. Hubo teoría, ejemplos funcionales y consejos, hubo tiempo para jugar a Fantasma Blitz y para escapar de una catacumba romana.

Hasta ahí, nada fuera de lo común. El detalle al que me refería fue la presencia en la sala de 3 grandes exalumnos y mejores personas. Me hicieron recordar lo bien que lo pasaba con ellos en las clases y lo mucho que un docente puede llegar a echar de menos a sus alumnos, pase el tiempo que pase.

Como ya comenté en una entrada anterior, tres de mis alumnos (Juanmi, Hakim y Ioanna) quisieron hacer un mazo de cartas sobre la Guerra Fría para Magic the Gathering. Leyeron, estudiaron y buscaron imáganes de ese periodo. Consiguieron hacer dos barajas funcionales mediante un proceso didáctico: aprendieron a aprender, demostraron una gran iniciativa, usaron las TIC, lo comunicaron por escrito y de forma oral y lo hicieron en equipo.

Juanmi y  Hakim (Ioanna no pudo asistir pero me hizo un regalo magnífico)  me hicieron el honor de acompañarme en esta formación. Y ya que estaban allí se me ocurrió que, al hablar de ejemplos de ABJ, no solo debía hablar en nombre de otros docentes. Los alumnos protagonistas del proceso de aprendizaje debían tener voz. Y hablaron.

Juanmi y Hakim estuvieron a la altura de la situación, supieron mostrar su producto, justificar su uso y demostrar su aprendizaje. Explicaron paso a paso lo que hicieron y defendieron el uso de la gamificación y el ABJ en las aulas. Se les vio seguros y respondieron las preguntas de los asistentes. Todo ello lo hicieron sin preparación previa, sin necesidad de insinuarles lo que debían decir. Y aunque en su centro no crean en estas cosas, ellos son la prueba patente de que lo que algunos nos atrevemos a hacer funciona de verdad.

Su visita, su sinceridad, su actitud y sobre todo su esfuerzo por acudir me hicieron darme cuenta de que este blog no es solo mío. Este blog no habría existido sin ellos y sin todos aquellos alumnos que, después de 9 años de carrera profesional, se sentaron a mi mesa a hacer rodar los dados, a sacar cartas, a contar historias, a conquistar territorios, a mover fichas y ,en definitiva, a aprender de otro modo.

Gracias a todos: a los que me enseñaron y a los que aprendieron, a los que conocí y a los que no se dejaron conocer mucho, a los que todavía nos seguimos por las redes y a los que me saludan por la calle, a los que me pidieron más partidas y a los que me llamaron friki, a los que se emocionaron y me hicieron emocionar.

¡Gracias por facilitarme llegar a las 200 entradas!

¡Para celebrar la duecentésima entrada y la publicación del libro Educar Jugando de Nexo Editorial (en el que colaboro con un capítulo) voy a sortear un ejemplar entre los lectores! ¡Estad atentos!

 

 

 

Los mundos que escribes. Una reseña entusiasta.

Resultat d'imatges de los mundos que escribesHace unos meses HTPublishers editó, vía Verkami con gran éxito, «Los mundos que escribes» de Fabián Plaza Miranda. Es un manual introductorio a las técnicas de la escritura para jóvenes escritores. He tenido la suerte de podérmelo leer y he de decir que cumple lo que promete y más.

La prosa es sencilla, clara, pero no por ello simple. Aunque está dirigido a un público joven, no lo infravalora. Analiza los entresijos de la expresión escrita con profundidad y naturalidad, poniendo luego ejemplos esclarecedores o volviendo a repetir la explicación desde otro ángulo. Así, de un mismo concepto proporciona diversos puntos de vista, adaptados según la capacidad del lector. También proporciona herramientas y consejos prácticos. Con esto consigue que sea un manual muy útil aunque quien lo esté leyendo no sea ya joven y haga años que pasó la selectividad.

Analiza esclarecedoramente párrafos de obras capitales de la literatura, de la ciencia-ficción pero también de otros géneros. Transmite amor por los libros en cada página. Propone ejercicios para reforzar la comprensión de lo que se está exponiendo. Si por mi fuera, este libro sería el libro de texto para la asignatura de Lengua y Literatura en todos los institutos. El libro invita a leer «El viejo y el mar» y yo, que me lo leí y no me gustó en absoluto, tuve unas ganas terribles de buscarlo y volverlo a leer a la luz de las explicaciones que brinda «Los mundos que escribes«.

Un texto muy recomendable. Incluso aunque no escribas, ya que es un placer leerlo. Y, una vez lo hagas, ya no volverás a leer las novelas del mismo modo.